CAP III
Leire se acicalaba en su casa, le gustaba ir siempre bien vestida,adoraba sus converse, y sus sudaderas de RAMS 23.Parecía algo increíble pero Rober se llevó una grata sorpresa esa mañana que había decidido coger mejor el bus que la Vespa.Allí en la última parada estaba,ella.¿Cómo podía ser eso?-Toda la vida viviendo en el mismo sitio y nunca la había visto, simplemente por el hecho de que vivía una calle más abajo.
La rutina volvía a acomodarse en la vida,no dejaba de llover y las clases seguían siendo igual de aburridas.Leire estaba más guapa cada día, y Rober no le quitaba ojo de encima.Poco a poco fue averiguando cosas de ella, como por ejemplo que a parte de, Yoli y Sara, tenía otra de sus mejores amigas en la clase de al lado.Era Mónica,una chica bajita, de pelo moreno muy ondulado casi rizo y unos coloretes muy simpáticos en sus mejillas.Eran amigas inseparables.
Pero la vida no es un camino de rosas, para nadie,y los sueños son como burbujas que pueden explotar en cualquier momento,frágiles,sensibles,inalcanzables....
Otro día de vuelta a casa, y otra tarde en el conservatorio acariciando las teclas del piano de la cabina número 5 como si de la piel de Leire se tratase.Estaba loco por ella, no paraba de pensar en su sonrisa, de darle vueltas de todo lo que hacía, hasta la forma en la que esta mañana lo había saludado al entrar en clase.
El aire chocaba fuerte en la cara de Rober, que conducían su vespa.
-Olía a su perfume
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